Como sé que es de bien nacido ser agradecido, voy a iniciar este texto
dando las gracias al Schalke04, si, han leído bien, quiero dar las gracias a
este club alemán por haberme inspirado y motivado en la noche de ayer para escribir
estas líneas. No voy a hablar de planteamientos, de dibujos tácticos o de
resultados, eso se lo dejo a muchos otros que parecen saber infinitamente más que
yo (aunque jamás se hayan vestido de corto o hayan dado una patada a un balón,
salvo en la videoconsola), yo quiero hablar de algo mucho más sencillo, algo
que considero la madre de todas las relaciones, ya sea con uno mismo, con otra
persona o con la sociedad, y el fútbol no es ni debe ser ajeno a ello, yo
quiero hablar de educación y respeto.

Huelga decir que al final del partido la escena se repitió, los jugadores
unidos por sus manos y levantándolas al unísono se despedían de los seguidores
que no cesaban de cantar. Qué delicia de
imagen para todos los que entendemos este deporte como una pasión, una pasión
por y para el aficionado.
No pude evitar albergar una sensación de envidia sana, ojala un día vea esto
con mi Real Madrid pensé, y después de lo visto ayer no encontraré una excusa
para que no sea así, cuando se gane o cuando se pierda, el respeto por tu
afición siempre, pero aún más cuando se desplaza fuera de casa, es sagrado,
innegociable, y es que es en este apartado en el que lo que vi ayer cambio mi
percepción de este deporte, yo también quiero sentir que soy parte de la
camiseta, de su éxito y de su derrota, pero siempre caminando junto con mis
jugadores, y no quiero gestos aislados (Gareth Bale no hay partido en el
Santiago Bernabéu, al igual que hacia David Beckham en el que no se vaya al
centro del campo a aplaudir al respetable). Esto, que debería ser un gesto
conjunto me temo estamos muy lejos de verlo con nuestro RM, unos jugadores y un
club tan acostumbrados a no tener regla alguna en la relación jugadores –
afición. A este respecto la educación del Club se antoja fundamental y creo y
soy firme partidario de formar a los futbolistas en la materia, unos por
dejadez, otros por incultura y otros simplemente porque no quieren, jamás
sabrán lo que significan los pequeños gestos como el de ayer para los
aficionados, hay que hacérselo ver, y aquí culpo 100% al club, el madridismo no
se compra con insignias, el madridismo quiere y necesita estar cerca de sus
jugadores, sentir que somos parte de un proyecto común, se gane o se pierda, el
madridismo necesita gestos. Y los jugadores estar preparados y formados para
transmitirlos. No será tarea fácil pero merecerá la pena intentarlo,
Después de lo visto esa noche cada día me gusta más la relación que una
gran cantidad de clubes de Europa, sobre todo en Alemania e Inglaterra,
desarrollan con sus aficionados, y de la que tan lejos estamos aún en España...Señores,
sigámonos llenándonos la boca al hablar de nuestra Liga, la mejor del mundo,
siento no estar de acuerdo. Permítanme que les diga, la educación y el respeto
no entienden de número de equipos vivos en una competición o de la inversión en
fichajes o de marketing y grandes nombres, entienden de cuidar al aficionado a
través de esos olvidados pequeños grandes detalles, y eso señores es
responsabilidad de los Clubes.
Pd: he recuperado una camiseta del Schalke04 que compre en una visita a
Gelsenkirchen hace unos años y curiosamente esta es la leyenda que aparece en
el cuello “Tausend Freunde die Zusammen Sthen” o lo que en español quiere
decir, 1000 amigos que juntos caminan, pues eso, pequeños grandes detalles…Hala
Madrid & Vielen Danke Schalke04!
Fdo: Un madridista.
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